26/agosto /2016 / Sala Superior 317/2016

Ciudad de México

En el auditorio principal de la Unidad de Congresos del Centro Médico Nacional Siglo XXI, se llevó a cabo el Seminario Internacional “Derecho Nacional e Internacional, Desafíos Compartidos”, actividad prevista dentro del 55° Periodo Extraordinario de Sesiones convocado por la Corte Interamericana de Derechos Humanos (CoIDH), en colaboración con la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), así como de la Organización de los Estados Americanos (OEA).

María del Carmen Alanis Figueroa, magistrada del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF), participó como moderadora en el Panel IV: Género y Justicia, en donde sostuvo que México es un país comprometido con el cumplimiento de los Tratados Internacionales en materia de derechos humanos y con el juzgamiento con perspectiva de género. Tal y como dan cuenta las jurisprudencias, los protocolos elaborados –particularmente el de Juzgar con Perspectiva de Género- y, por supuesto, el hecho de que esta sea la tercera vez que se celebra en México el periodo extraordinario de sesiones de la Corte Interamericana de Derechos Humanos.

La juzgadora recordó que en su trayectoria judicial pudo constatar que el enfoque de género es indispensable para el acceso a la justicia, elemento fundamental del Estado de Derecho y señaló que la recomendación general número 33 de la CEDAW establece que el acceso a la justicia es fundamental para la realización del resto de los derechos humanos y que, además, optimiza el potencial emancipador y transformador del Derecho.

La Magistrada precisó que México es un país comprometido con el cumplimiento de los Tratados Internacionales en materia de derechos humanos y con el juzgamiento con perspectiva de género, puesto que de ello dan cuenta muchas acciones como las jurisprudencias, protocolos de actuación, etcétera.

En este sentido precisó que el Protocolo para Juzgar con Perspectiva de Género, señala que, para juzgar con dicha perspectiva, es necesario asumir que el quehacer jurisdiccional tiene un invaluable potencial para la transformación de la desigualdad formal, material y estructural. Quienes juzgan, son agentes de cambio en el diseño y ejecución del proyecto de vida de las personas.
La magistrada Alanis Figueroa agradeció y reconoció lo importante de las contribuciones de las Ministras Norma Lucía Piña Hernández y Margarita Beatriz Luna Ramos, quienes con su experiencia en la impartición de justicia han sido pieza fundamental en la implementación no sólo del protocolo, sino de todos los aspectos que permiten visibilizar las desigualdades a las que se enfrentan las mujeres.

Además, al referirse a la intervención de la jueza Elizabeth Odio, señaló que en el pasado, la Corte Interamericana de Derechos Humanos, no en todos los casos, detectó los problemas de género que se involucraban en los asuntos que resolvía y que, como demostró en su participación, esto ha cambiado radicalmente y, hoy por hoy, se cuenta con sentencias muy valiosas que abren el camino para la impartición de justicia con perspectiva de género en los países de la región.

Respecto a la participación del Dr. Fix Fierro comentó que en aquellos casos en donde se detecta la idea de inferioridad de las mujeres es más fácil que las autoridades puedan actuar, sin embargo, en algunas ocasiones, es difícil probar en términos jurídicos que esos actos se basan en la idea de inferioridad de las mujeres, lo que dificulta darles consecuencias de Derecho.