NECESARIO ATENDER LA DISCRIMINACIÓN Y SESGOS DE GÉNERO EN LAS CAMPAÑAS DE LAS CANDIDATAS
16/agosto /2016 / Sala Superior 298/2016
Ciudad de México
- La magistrada María del Carmen Alanis Figueroa destacó datos que demuestran que la distribución de los recursos de radio y televisión de los partidos no se reparte igualitariamente entre hombres y mujeres
- Alanis Figueroa resaltó varios ejemplos de violencia y discriminación contra las mujeres en sus campañas
En el Auditorio del Instituto Nacional Electoral (INE) de la Ciudad de México, se lleva a cabo el foro: La cobertura de los procesos electorales en la radio y la televisión, lecciones, resultados y perspectivas desde la experiencia del monitoreo de espacios noticiosos durante los procesos electorales 2015 y 2016, convocado por el Instituto Nacional Electoral y por el Comité de Radio y Televisión. El objetivo de este espacio es analizar los principales retos y perspectivas para los próximos procesos electorales en materia de cobertura mediática con enfoque de género.
María del Carmen Alanis Figueroa, magistrada del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF), participó en la Mesa 5: Perspectiva de género en la cobertura informativa. ¿Se dio igual trato en los medios a las candidatas y a los candidatos?, acompañada por Aimée Vega Montiel de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), Sofía Palau Cardona de la Universidad Jesuita de Guadalajara (ITESO) y Yuri Gabriel Beltrán Miranda, consejero del Instituto Electoral del Distrito Federal (IEDF).
Alanis Figueroa se centró en demostrar, con base en datos y ejemplos, los sesgos de género y discriminación en contra de las mujeres en sus campañas. Destacó que tanto la distribución inequitativa de los recursos de los partidos, como las agresiones verbales estereotípicas contra las mujeres y la descalificación de sus propuestas, pueden constituir violencia política de género.
La Magistrada invitó a reflexionar sobre cuál debería ser la respuesta judicial a un discurso discriminador y/o violento basado en el género. Consideró que, tanto las autoridades electorales como los partidos políticos deben contrarrestar ese discurso explicando, por los medios que les corresponde, por qué ese tipo de ideas arraigadas en la sociedad resultan anacrónicas, arcaicas, devienen en discriminación y generan que perdamos la aportación de más de la mitad de la población: las mujeres.
Resaltó que las mujeres deben tener las mismas oportunidades para presentar sus propuestas, para que el electorado las conozca y pueda formarse un criterio para ejercer su derecho al voto. Concluyó señalando que lo que tiene que llamar la atención y convencer en las campañas son los proyectos políticos y no los cuerpos de las mujeres y de las candidatas.