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LA ESENCIA DE LA DEMOCRACIA ES LA IGUALDAD Y EL TEPJF LA FORTALECE CON SUS SENTENCIAS: GONZÁLEZ OROPEZA

23/junio /2016 / Sala Superior 215/2016

Xalapa, Veracruz

  • El Magistrado de la Sala Superior estableció que los tribunales pueden marcar políticas públicas en la protección de los derechos humanos
  • Las autoridades deben evitar la discriminación, la cual está prohibida por la Constitución, dijo

Manuel González Oropeza, magistrado del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF), aseguró que la esencia de la democracia es la igualdad, y la Sala Superior y las Salas Regionales han realizado una labor importante a través de sus sentencias para hacer efectiva la paridad de género establecida en la Constitución.

“Queda el legado de nuestras sentencias en paridad de género. Nos podrán criticar, pero no podrán negar que el Tribunal Electoral con su Sala Superior y Salas Regionales han hecho una labor importante para lograr la esencia de la democracia, que es la igualdad, y esa igualdad nos obligó no solamente a exigir las cuotas de género, también las acciones afirmativas”, expresó.

Al presentar el libro de su autoría Hacia una democracia paritaria. La evolución de la participación de las mujeres en México y sus entidades federativas, González Oropeza indicó que los tribunales están en la etapa de marcar políticas públicas, tarea que no es exclusiva del Legislativo o el Ejecutivo; “todas las autoridades tenemos la obligación de permitir que los jueces podamos ir más allá del texto de la ley” para proteger los derechos humanos.

En el Salón de Sesiones de la Sala Regional Xalapa, el Magistrado resaltó que los jueces han tomado un papel preponderante porque tienen como objetivo garantizar el fin superior que es promover y favorecer la protección de los derechos humanos.

El magistrado González Oropeza afirmó que las resoluciones alcanzadas por el TEPJF representan un ejemplo y un caso de estudio sobre cómo los derechos humanos, particularmente los derechos políticos, pueden ser promovidos “no solamente por la Legislación, por la Constitución, por el Poder Ejecutivo, sino por el Poder Judicial. La fuente de los derechos deber ser aterrizada a los casos particulares por los tribunales”.

Las autoridades deben evitar la discriminación, la cual está prohibida tres veces en la Carta Magna
En su exposición, el Magistrado de la Sala Superior señaló que los derechos políticos consagrados en la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos y en las leyes son posibles, siempre y cuando haya un operador jurídico que los implemente.

Además, explicó, cada autoridad, en el ámbito de su competencia debe hacer lo necesario para evitar la discriminación de género, la cual está prohibida tres veces en nuestra Carta Magna.

En el artículo primero se señala la prohibición de la discriminación por razón de género; en el artículo segundo, apartado A, fracción segunda, se establece que las autoridades tienen la obligación de rescatar la dignidad de las mujeres; y en ese mismo artículo y apartado, en la fracción tercera se indica que las comunidades indígenas tienen la facultad de elegir a sus propias autoridades garantizando el derecho de las mujeres.

En tanto, Juan Manuel Sánchez Macías, magistrado presidente de la Sala Regional Xalapa, reconoció que desde la Sala Superior se ha realizado una labor titánica para generar conciencia de que las mujeres deben participar en todos los ámbitos públicos.

Karolina Monika Gilas, investigadora del Centro de Capacitación Judicial Electoral del TEPJF y coautora de la obra, consideró que se debe alcanzar la igualdad en la vida social, en la agenda del porvenir, porque se trata de alcanzar la igualdad política, la cual va encaminada a construir una democracia paritaria.

Por su parte, Carlos Báez, director del Centro de Capacitación Judicial Electoral, señaló que el Tribunal Electoral y todas las Salas han incorporado sentencias para fortalecer esta visión y expresar el compromiso de la paridad y de la justicia electoral.

En la presentación del libro estuvo presente Edna Arrez Rebolledo, directora del Instituto Veracruzano de las Mujeres y la moderación de la presentación del libro estuvo a cargo del magistrado Enrique Figueroa Ávila.