25/marzo /2016 / Sala Superior 89/2016

Ciudad de México

Las instituciones electorales y mecanismos internacionales pueden motivar transformaciones profundas para evitar que los conflictos político-electorales se den o se queden en las calles, aseguró Rubén Enrique Becerra Rojasvértiz, visitador general del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF).
“Debemos comprender que los conflictos político-electorales son tan naturales a una contienda; por ello, lo importante es que el conflicto y la evolución del conflicto no se quede o no se dé en las calles o a través de factores y elementos que perjudiquen las instituciones”, indicó.
Durante una charla en el programa Punto y Aparte, que se transmite por Plataforma Electoral, el canal de televisión por Internet del TEPJF, el funcionario destacó la resolución 10.180 de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos de 1987, con la cual se protegieron los derechos político-electorales de los ciudadanos al contar con un medio de defensa en la materia.
Explicó que en dicha resolución se advertía que en México no existía un medio de impugnación o algún recurso que estuviera al alcance de los ciudadanos o de los partidos políticos para inconformarse, tanto por los resultados electorales, como por las controversias que surgieran durante las distintas etapas de los procesos comiciales, además, de que en este tránsito de la organización electoral hacia el cómputo final de los resultados electorales había mucha incertidumbre.
Becerra Rojasvértiz, coordinador del libro Los derechos políticos y la democracia en México, Reflexiones en torno al caso 10.180, editado bajo el sello del TEPJF, consideró que desde las instituciones que tenemos los mexicanos, o ya sean internacionales, podemos motivar transformaciones profundas e incluso, como fue en el caso mexicano al que hace referencia la resolución 10.180, ayudar a la consolidación de la democracia mexicana.
En ese sentido, Becerra Rojasvértiz añadió que la Comisión Interamericana emitió recomendaciones para atender dos aspectos centrales: uno, el reconocimiento de los derechos político-electorales en términos de “un piso parejo” para la competencia, y segundo, la existencia de un recurso eficaz para garantizar la defensa de los derechos político-electorales ya reconocidos como derechos humanos.
En este sentido, destacó la labor del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación y la línea jurisprudencial de la utilización de tratados internacionales y el desarrollo de contenidos, así como de normas para regular y proteger derechos fundamentales.
Durante el programa conducido por Víctor Alarcón Olguín, académico de la Universidad Autónoma Metropolitana, y por Carlos Báez Silva, director del Centro de Capacitación Judicial del TEPJF, cuyo propósito es analizar bibliografía sobre temas electorales, el visitador dijo que el reto para un Estado democrático no consiste en hacer más extensivos los derechos fundamentales. “El reto es que todos estemos conscientes de aplicarlos y como los derechos fundamentales no pueden ser regresivos, el Estado mexicano tendrá que estar pendiente de su desarrollo a nivel internacional y no quedarse atrás”, precisó.
El programa Punto y Aparte se difunde todos los viernes, a las 10:00 horas, por www.te.gob.mx/plataformaelectoral además, se puede seguir en línea y descargar bajo demanda.
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