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TEPJF COMPROMETIDO CON LA CALIDAD DEMOCRÁTICA Y CON LA PARTICIPACIÓN POLÍTICA DE LAS MUJERES: ALANIS FIGUEROA

21/octubre /2013 / Sala Superior 173/2013

México D. F.

El Tribunal Electoral fundamenta sus resoluciones en la Constitución para lograr la igualdad

Al tutelar los derechos político-electorales de las mujeres para que puedan votar, ser votadas y participar en los asuntos públicos del país, así como en la toma de decisiones, el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF) protege el acceso de las mujeres a la justicia electoral y garantiza la calidad de nuestra democracia, señaló María del Carmen Alanis Figueroa, magistrada de la Sala Superior.

Durante la emisión del programa Justicia electoral a la semana, que conduce la periodista Guadalupe Juárez y se transmite por el Canal Judicial, la magistrada puntualizó que, con sus resoluciones, el TEPJF “le apuesta” a que el Poder Legislativo plasme en la Constitución el principio de paridad de género. “Ahora, apostemos a la paridad en los órganos de representación de todos los espacios de toma de decisiones y de diseño de políticas públicas, para materializar esa igualdad entre hombres y mujeres”, agregó.

Tras hacer un balance de los actos conmemorativos del 60 Aniversario del Voto de la Mujer en México, de los que formó parte el Tribunal Electoral, Alanis Figueroa reflexionó que el principio de paridad no es destinar una proporción de los cargos de representación a las mujeres, sino rescatar que somos iguales, 50% mujeres y 50% hombres, en el ejercicio de los derechos y de las oportunidades para participar en la vida pública.

La magistrada de la Sala Superior refirió que gracias a la lucha por la defensa de los derechos político-electorales del sector femenino, emprendida desde el siglo pasado por las insurgentes, revolucionarias, porfiristas, anti-porfiristas, así como por diversos grupos de mujeres de todos los partidos políticos, de la sociedad civil, y hombres que en los últimos años las han acompañado en esta encomienda, hoy el sufragio femenino es un derecho establecido en nuestra Constitución.

“Hemos avanzado en el tema de paridad de género, pero aún falta lograr la igualdad sustantiva en todos los órganos de representación”, comentó tras explicar que a pesar de que México adoptó un sistema de cuotas en su legislación electoral, se han establecido excepciones que han impedido que los partidos políticos registren a mujeres para buscar un cargo de elección popular.

Ante ello, citó que el TEPJF intervino con la resolución del juicio ciudadano 12624/2011 y la Sala Regional Guadalajara inaplicó preceptos de la legislación electoral en Chihuahua para hacer cumplir la norma, lo cual se refleja en el Congreso de la Unión, así como en el Congreso de la referida entidad federativa, donde actualmente hay más presencia femenina.

Actuaciones del Tribunal encaminadas a la igualdad

La magistrada afirmó que el Tribunal Electoral ha refrendado su compromiso con la búsqueda de la igualdad sustantiva así como para evitar y erradicar cualquier forma de violencia en contra de las mujeres, gracias a sus actuaciones fundamentadas en la Constitución y en los instrumentos internacionales en materia de género, de los cuales México es parte, como la Convención sobre la eliminación de todas las formas de discriminación contra la mujer (CEDAW) y la Convención de Belém Do Pará.

Alanis Figueroa enfatizó que la igualdad y la participación efectiva de las mujeres en la toma de decisiones públicas, no es en detrimento de los hombres, sino para lograr la complementariedad de las dos mitades de la población en el mundo. Por ello, consideró necesario que exista un lenguaje incluyente en todos los ámbitos de la sociedad, así como una armonización de las leyes electorales para el establecimiento de cuotas en cargos federales, estatales, municipales y locales.

Remarcó que la igualdad de género es un tema de diseño normativo y de cultura política que se debe fortalecer al interior de los partidos, pero también se debe difundir entre la sociedad para que las mujeres exijan y denuncien la violación de sus derechos político-electorales.

Como punto positivo mencionó que cuando más mujeres acceden a un cargo de elección popular, se crea un círculo virtuoso favorable a ellas, porque hay más comunión de intereses y compromisos por legislar en temas relacionados con la equidad.



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